Hoy es uno de esos días en que fue mala idea despertarme, mi intuición, mi curiosidad y buscar respuestas donde ya sabía los resultados acompañaron mi mañana, fue como despertar en otro tiempo, en otra época una que creía sepultada cien metros bajo tierra, pero quien dice que el pasado no regresa se equivoca, a veces viene para probarte, para recordarte que no debes olvidar, que lo que un día te hizo daño puede volver con otro rostro, en otra persona.
Hoy leía un chat y su contenido podía ser de cualquiera, de muchos que ya había leído anteriormente no había diferencia, siempre lo mismo la único diferente era quien lo había escrito, alguien que juzgó, condenó actos tan similares para terminar siendo igual y además aventajada pues llevaba la sabiduría de un pasado que debieron ser unas recapitulaciones para el futuro, pero no fue así, no aprendió nada o simplemente no quiso hacerlo, simplemente prefirió ser aquello de lo que tanto había huido.
Quiero pensar que el problema lo tengo yo, que yo soy la retrógrada, soy esa persona que quiere creer en la honestidad, la sinceridad, los principios, la que pone a la familia siempre de primero y me equivoqué.
Se leal… aún cuando no lo sean contigo, sigue teniendo principios, valores y prioridades. Es ser retrógrada eso?no lo creo
Me gustaLe gusta a 1 persona
Si se hace lo que a uno le parece correcto, no estamos fuera de lugar. Lo demás no van a imponer sus reglas en nuestras decisiones.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Sí a la esencia de las buenas personas, las buenas acciones. Además te sientes bien.
Saludos swingers-lifestyle.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias. Saludos
Me gustaLe gusta a 1 persona
El pasado regresa una y otra vez, digan lo que digan, porque el ser humano no aprende. En cuanto a ti, no te conozco, pero no te juzgues tan severamente porque tú ni eres retrógrada, ni nada. Eso sí todo, tarde o temprano va a su lugar. Un fuerte abrazo y eso de enfrentarse a días como estos te enseña a quién escuchar, a quién amar y a quién no.
Me gustaLe gusta a 1 persona
La lealtad, la generosidad, la empatía, ni tienen fecha de caducidad ni se quedan nunca anticuadas, aunque a veces viendo lo que vemos, pensemos que sí.
Lo importante es ser fieles a nosotros mismos.
Abrazos.
Me gustaLe gusta a 1 persona